El lobby de un hotel posee un alto tráfico de personas. Es donde la gente se reúne y espera; y es, por lo tanto, un lugar perfecto para colocar señalización digital, ya que es ideal para mostrar y establecer su marca y productos.
Las pantallas digitales en la recepción de un hotel ayudan a informar y entretener a los huéspedes y puede añadirle un aire de sofisticación; algo que las pantallas más pequeñas e individuales ya no consiguen.
Es por esto que se han implementado como una solución atractiva para captar la atención de grandes y pequeños y un punto de partida clave para el compromiso digital, a largo plazo, con el cliente.
Una pantalla de vídeo puede ser una obra de arte única que captará la atención de los huéspedes permitiéndole promover la cadena de hoteles, lugares de interés o anuncios de productos.
En resumen, es una inversión valiosa que produce mejoras sustanciales desde el primer día en la percepción de la marca.
En este artículo analizaremos algunos tips para su uso y datos importantes a la hora de elegir una pantalla.
- Diseño y singularidad: factores claves para los hoteles interesados en una buena primera impresión. Dichas pantallas pueden instalarse en paredes, ya sea de manera tradicional, de rejilla o de video, emulando estilos artísticos de mosaicos, pantallas en ángulo y no tradicionales.
- Información: pueden brindarse noticias o anuncios de los eventos que ocurren en las instalaciones y alrededores, o promover el turismo y las actividades que se realizan. Además, pueden interactuar con las redes sociales, invitándolos a compartir su experiencia o mostrándoles las ofertas gastronómicas del restaurante local. Incluso, pueden utilizarse para recomendar las mejores habitaciones del hotel.
- Ubicación: A la hora de pensar en el mejor lugar hay que tener en cuenta que su objetivo es complementar el espacio, al igual que un atractivo para los presentes. Es importante considerar el área donde estará instalado, el espacio y el entorno serán los que rijan el tamaño del dispositivo.
- Otro aspecto que debe analizarse es qué tipo de pantalla se puede adaptar mejor al espacio. Algunas de las opciones pueden ser: una pared, mosaico de video de estilo artístico, o una clásica pantalla de cuadrícula tradicional.
- Y por último, si no es una construcción o renovación, la ubicación de los tomacorriente y la conectividad. Vale decir que, de todas formas, la mayoría solo necesita es un controlador de pantalla.
En definitiva, el vestíbulo es el cuarto más importante del hotel y una pantalla de video podría ser su aliada a la hora de la “primera impresión”, mantener informado a los huéspedes, y brindar una experiencia visual completa del hotel y sus cadenas.
Las pantallas de gran tamaño son, en resumidas cuentas, recursos maravillosos a la hora de unificar y potenciar la experiencia en su hotel, crear y posicionar una marca y convertirse en una efectiva plataforma de publicidad en la zona con mayor potencial comercial de todo el edificio.